LA BARRA DE AL LADO

 
 
 

LA BARRA DE AL LADO

CDMX, Mexico, 2024

 

Una atmósfera que transporta a los expendios de comienzos de siglo XX, los colores del ocaso y un diseño que invita al encuentro, son algunos de los aspectos que destacan en esta nueva propuesta, concebida por el estudio dirigido por Andrés Mier y Terán y Regina Galvanduque.

 

SERVICES

ARCHITECTURE/INTERIOR
PRODUCT/INDUSTRIAL/FURNITURE
VISUAL IDENTITY
STORYTELLING

 
 

El principal concepto tras La Barra de al Lado es el que fuese un punto de encuentro casual, pensado en los amigos que desean platicar y disfrutar de un antojo al paso, rompiendo con la monotonía de la rutina diaria. Este quiebre con lo establecido se ha traducido en un lenguaje estético que pone en valor lo antiguo, expresado a través de la utilización de maderas nobles, muebles de recuperación y una gama cromática que remite a los tonos del atardecer mexicano, aspectos que distinguen esta propuesta de los modernos locales circundantes

 

 
 

El alma de La Barra de al Lado está a cargo de la chef Lula Martín del Campo, quien junto a su hermano Nico ha compartido, durante más de 30 años, el amor por crear conceptos innovadores que permiten vivir con mayor alegría los momentos cotidianos.

Las creaciones de Lula y Nico están disponibles también para llevar, existiendo una gran variedad de licores, destilados, conservas y encurtidos de elaboración propia.

Esta idea de permanencia y calidez se hace presente en el diseño de MYT+GLVDK, que al igual que la carta del lugar, busca destacar en cada detalle la herencia cultural de lo producido en México. Al interior, el color de los muros está dado por un pigmento elaborado a base de barro con cebolla morada, mientras que los pavimentos se materializaron en una resina epóxica en color arcilla, que junto al diseño de iluminación –en tonos dorados– crea una tensión entre lo tradicional del mobiliario y la modernidad de estos elementos.

Para el mobiliario se han privilegiado piezas realizadas en madera de mezquite, tzalam y álamo, desgastadas y de terminación opaca. La barra del lugar —sin duda la gran protagonista— proviene de una antigua cantina del año 1930 y ha sido restaurada para este espacio. Otros muebles de recuperación, así como las repisas perimetrales, han sido tratados con la técnica del “mantel”, brindando calidez y atmósfera. Los asientos y las mesas se han diseñado pensando en la breve estancia que se espera de un lugar cuyo menú está centrado en antojitos y botanas; por las patas del mobiliario sube el tono arcilla del piso, jugando con la idea de estar untados en alguna salsa.

 

La identidad visual de La Barra de al Lado destaca por el diseño de una tipografía propia, que conjuga conceptos modernistas —inspirados en las creaciones de Lance Wyman— junto a la distorsión visual que puede provocar la

embriaguez. Para los diferentes licores y viandas, MYT+GLVDK diseñó una serie de empaques y complementos, con envases en vidrio ámbar e ilustraciones modernas en tonalidades cálidas y serenas, cuyo juego de curvas y contracurvas hace alusión a la forma de las dos cabezas que están detrás de este proyecto.